Charles Chaplin publicó en 1922 este libro en el que relata el viaje que hizo después del estreno de "El chico", viaje en el hace un trayecto por Estados Unidos de Los Angeles a Nueva York, para luego salir del país hacia Inglaterra, Francia y Alemania.
El cineasta se codea con las figuras más importantes de la cultura (desde colegas de profesión como Douglas Fairbanks y Mary Pickford, hasta escritores de la talla de H.G.Wells) , ridiculiza a los periodistas que le hacen las cansinas preguntas de siempre, escapa de sus númerosos fans que le acosan en cualquier ciudad, visita los lugares dónde se crió en su infancia y se muestra orgulloso de su éxito aunque a esas alturas todavía le quedaban por realizar los mejores largometrajes de su filmografía.
La lectura de este libro es más que interesante, Sus páginas son la propia voz de Chaplin y me parece un testimonio
imprescindible para sus admiradores porque cuenta como ve el mundo, sus
amistades, la relación con el público y el interés que tenía por los
temas de actualidad. También es cierto que aparece como una figura algo exquisita en sus gustos y aunque siempre acaba teniendo palabras para los desfavorecidos y recuerdos de su mísera infancia, le importan las relaciones sociales, el éxito, el arte en mayúsculas y tiene cierta admiración por el mundo de los artistas de los que él, en su época y ya para siempre, es una figura mundial imprescindible.
2 comentarios :
Chaplin siempre tuvo fama de cierta grandilocuencia y fantasía al narrar su biografía... No sé cuánto hay de cierto en esto...
No recuerdo mucho de esa autobiografía que me leí de chaval pero estas "andanzas por Europa" no parecen muy exageradas aunque sí un poco pedantes en cuanto a sus gustos literarios y sus relaciones sociales.
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