3 de julio de 2012

CORTOMETRAJES DE ROMAN POLANSKI



En el canal TCM autor pude ver una recopilación de los primeros cortometrajes de Roman Polanski presentados por Roberto Cueto. Algunos son muy breves y realizados mientras el director polaco estudiaba. Casi todos mudos o con muy poco dialogo, siendo el más conocido Dos hombres y un armario (Dwaj ludzie z szafa, 1958).

Asesinato (Morderstwo, 1957)



Dos escasos minutos y mudo total (sin ni siquiera efectos sonoros o música) para una brevisima historia en la que un hombre asesina a otro mientras duerme en la cama de un cuarto.

Sonrisa de oreja a oreja (Usmiech zebiczny, 1957)



También muy corto y mudo total pero ahora ya tiene un escaso argumento en el que un hombre ve a su vecina medio desnuda al mirar por una ventana de la escalera común de la vivienda.  Eso le hace sonreír.

 Interrumpiendo la fiesta (Rozbijemy zabawe, 1957)



Mezcla entre documental y ficción porque Polanski rodó una fiesta real en la que unos gamberros (el elemento de ficción) entran sin estar invitados. Dicen que estuvo a punto de costarle la expulsión de la escuela de cine. 

Dos hombres y un armario (Dwaj ludzie z szafa, 1958)



El cortometraje más conocido aunque en mi caso lo es porque fue uno de los que tuvimos que adivinar en la última edición de El Juego pero aparte de esa curiosidad, es una historia surrealista en la que dos hombres cargan un armario que sacan del mar. Polanski hace una aparición secundaria.

Ángeles caídos (Gdy spadaja anioly, 1959)



La anciana mujer que cuida los urinarios públicos recuerda su vida (las imágenes del pasado son en color). Tiene mayor narrativa y ya ofrece un producto bastante elaborado. Polanski vuelve a aparecer como uno de los secundarios (el soldado que pierde las piernas en la batalla).

La lámpara (Lampa, 1959)



Mi corto preferido de Polanski. Una fabrica artesanal de muñecas se muestra como un lugar dónde los objetos parecen cobrar vida a base de luces, de primeros planos y de la amenaza del fuego que acaba con todo. 

Mamíferos (Ssaki, 1962) 



Divertidos estos dos personajes que se transportan el uno al otro en un trineo mientras van llenando la historia de gags muy propios del cine mudo.

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