El estreno de esta reunión de superhéroes ha venido precedido de Iron Man (2008), Iron Man 2 (2010), El increíble Hulk (2008), Thor (2011) y Capitán América (2011). Una apuesta por dar a ir conociendo al espectador, en primer lugar las andanzas de cada uno de los personajes y luego integrarlos en esta produccción que, al igual que en los cómics Marvel de los que proceden, forma un grupo para combatir juntos a favor del bien.
Es cierto que el universo marveliano ya ha tenido otras adaptaciones cinematográficas. En concreto, en los últimos años tenemos la trilogía de Spider-Man de Sam Raimi (2002-2007), The Amazing Spider-Man (2012), la saga X-Men (2000-2011), Hulk (2003), la trilogía de Blade (1998-2004), The Green Hornet (2010), The Punisher (2004) y Punisher: War Zone (2008), Elektra (2005) o Los Cuatro Fantásticos (2005) y Los Cuatro Fantásticos y Silver Surfer (2007); pero las relacionadas en el primer párrafo son las que directamente han preparado el estreno de Los Vengadores.
Lo realmente interesante es que la película funciona como la mejor de las adaptaciones de los cómics Marvel a la pantalla y lo hace porque mantiene el espíritu de las viñetas con la espectacularidad de las imágenes y la personalidad de cada uno de los superhéroes. Resulta una gozada ver juntos a Iron Man, La Viuda Negra, Hulk, Capitán América, Ojo de Halcón, Nick Furia y Thor; peleando entre ellos, discutiendo pero también luchan codo con codo contra el malvado de turno.
Ahí es dónde está mi única pega, la que me hace que no haya subido hasta las cuatro estrellitas mi valoración, ya que Loki no es el malvado que a mí me hubiera gustado ver en pantalla. Ya de por sí se me hace aburrida y poco creíble, la incursión de los semidioses de Asgard en el planeta Tierra porque siempre he preferido (como lector de cómics y ahora como espectador de sus adaptaciones cinematográficas) a los malvados que no necesitan poderes ultraterrenales y que basan su poder en otras cosas, sean tecnológicas o adquiridas por cualquier circunstancia. Si Spider-Man es mi superhéroe preferido es porque sus poderes y la mayoría de sus enemigos no son tan increíbles como los de Thor, Loki y compañía. O a mí así me lo parece.
Claro que pegas personales aparte, resulta una maravilla poder ver las incursiones de esos superhéroes a los que he dedicado tantas y tantas lecturas de niño y de no tan niño, recreadas en la pantalla. No hay precio para poder comprobar que los chistes del estupeno Robert Downey Jr como Tony Stark se mezclan estupendamente con las increíbles prestaciones de su traje cuando se convierte en Iron Man, la imponente presencia de Samuel L. Jackson bajo el parche de Nick Furia, la sensualidad y habilidad física de Scarlett Johansson como La Viuda Negra, el duo Bruce Banner-Hulk interpretado por Mark Ruffalo o el musculoso Chris Evans bajo la piel del Capitán América. Ni Thor ni Locki son de mi devoción, pero tampoco lo eran en las viñetas y, en esta película, tampoco me ha gustado mucho el papel de Jeremy Renner como Ojo de Halcón. Al que no le pongo pegas es al director Joss Wheddon y espero con impaciencia la segunda parte de Los Vengadores para ver si sigue ofreciendo tan buen espectáculo.
2 comentarios :
Como tú también fui un fan de los cómics de superhéroes en mi adolescencia, y por el cariño que guardo de aquella afición, veo casi todas las películas que hoy en día les dedican y que en nuestros tiempos mozos echábamos de menos y eran muy difíciles de hacer por las limitaciones de la tecnología.
Tengo que decirte que "Los vengadores" no estuvo a la altura de mis expectativas y se debe principalmente a ese tono ligero elegido por Wheddon constantemente rebozado de "comic reliefs" (le tengo bastante manía a este recurso y quiero dedicarle un artículo)al que no ayuda precisamente un actor que se me indigesta bastante como es Downey Jr, que para mí sólo sabe hacer de él en todas sus películas.
El resto del reparto tampoco me resulta muy atractivo -ni siquiera Scarlett Johansson- y hasta le veo un aire algo afeminado a los protagonistas masculinos. La película es entretenida en general, pero personalmente hubiera preferido un tono más dramático como el de las sagas de X-Men o Batman...
Pues a mí ese tono que tú llamas ligero creo que es el apropiado para adaptar al cine los cómics de los que provienen los superhéroes. No me parece bien que se tomen muy en serio sus correrias porque para mí esos comics tienen esa ligereza y humor como una de sus principales características, por ejemplo los chistes del trepamuros mientras combate con sus enemigos.
Son adaptaciones de personajes de cómics, cómics que además se han hecho principalmente para un público juvenil y no entiendo a los que los critican por poca seriedad o trascendencia. No quiero olvidarme que cuando estos personajes se han adaptado de una manera más seria como en "Hulk" de Ang Lee, se ha perdido toda la esencia del personaje original.
Personalmente yo no puedo tomarme en plan serio a estos personajes aunque otra cosa son las últimas adaptaciones de Batman que no tienen nada que ver con el universo Marvel, sobre todo el de los primeros años.
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