Hasta ahora solamente cuatro películas han sido dirigidas por Agustín Díaz Yanez y ésta fue su debut y mi preferida.
La historia de una prostituta alcohólica, interpretada por una brillante Victoria Abril, mantiene un nivel magnífico en la mayor parte del metraje. Así nos encontramos inmersos en un relato violento, realista, que se ubica entre México y Madrid, y con otros buenos actores como Federico Luppi o Pilar Bardem.
Fue premiada con siete goyas y todo un éxito que auguraba una carrera más interesante y prolífica de su director pero que, sobre todo, volvió a dejarnos con la maestría de su actriz protagonista en un papel nada fácil por su dureza.
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