Publicada en 1964, la autobiografía de Charles Chaplin muestra la propia voz de uno de los cineastas más importantes de la historia del séptimo arte.
Chaplin narra las vicisitudes de su infancia con las penurias económicas que pasó en Londres y el ascenso artístico en el teatro de variedades para luego pasar al éxito cinematográfico con sus películas norteamericanas.
El libro se detiene en enumerar las relaciones de Chaplin con personalidades de su época y es ahí dónde encuentro el menor interés en su lectura ya que no escatima páginas en contar reuniones sociales con gente muy prestigiosa pero no siempre interesantes para el lector que quiere conocer detalles de su manera de ver el cine.
Sorprende que no se ocupe de otros cineastas importantes en su entorno como Buster Keaton del que no escribe ni una palabra o que, en realidad, sea en su mayor parte más una crónica social de las relaciones e intereses de Chaplin, que un relato sobre su forma de rodar, sus ideas sobre el cine, la creación de sus obras o la elaboración de los proyectos que acabaron siendo películas. Chaplin cuenta a veces más sobre sus gustos literarios que sobre los cinematográficos.
Por otro lado, se ocupa de mostrar, aunque no de una manera muy extensa, sus opiniones sobre algunas de las polémicas que tuvo en vida como sus ideas políticas, algunos de sus matrimonios fracasados o su ansia por el conocimiento elevado del arte de su época.
Está claro que leer esta autobiografía nos acerca a la persona que fue Charles Chaplin más que al cineasta pero cualquier aficionado interesado en su gran obra, tendría que darle una oportunidad como lector, aunque lo importante de su legado sea esa obra cinematográfica y no esta autobiografía en ocasiones aburrida y sin sustancia cinéfila.
2 comentarios :
Como admirador de Chaplin, siempre he tenido curiosidad por leerla, pero todavía no lo he hecho. Me tira para atrás que los entendidos dicen sobre el director que era bastante "imaginativo" rememorando su vida... No sé...
Era un libro que tenía pendiente y aunque a mí no me haya parecido una gran biografía (porque la mayor parte de las cosas a las que Chaplin da importancia no me interesan), son las memorias de este genio artista cinematográfico y no podía dejar de leerlas.
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