1 de septiembre de 2011

KILL BILL vol. 1 y 2 (2003, 2004) - Quentin Tarantino




Quentin Tarantino estrena en el 2003 y 2004, esta película dividida en dos partes por su excesiva duración y las llama volumen 1 y volumen 2. Cada una de ellas se fragmenta en cinco capítulos para narrar la venganza del personaje de la novia hacia los asesinos que irrumpieron en su boda para realizar una matanza con todos los allí presentes.

Envuelta en multitud de referencias cinematográficas y grandes momentos, la historia avanza con una brillantez visual que apabulla. La violencia es el motor de la acción que es filmada con una estética apasionante. Tarantino utiliza una narración no líneal, mezclando los recuerdos y hechos del presente, para formar el puzzle de acontecimientos que han llevado a la protagonista a su situación actual.

La violencia está presente desde el primer momento. Una violencia que es deudora del western, de las artes marciales, del cine negro y de todas esas cintas de acción de serie B que el director sabe cocinar en la batidora de su arte. Para un espectador que ha disfrutado con esa parte del cine que no es excelente pero que permite el exceso, el pop, el bizarrismo, la diversión por pura diversión; no hay más que gozar al ver como Tarantino sabe convertirlo en esta maravilla. 

Vale que no hay un argumento profundo, que los personajes tienen la superficie plana del estereotipo de la serie B, que todo se reduce a peleas con katanas, a disparos, acrobacias y chorros de sangre; pero está filmado de una manera tan desbordante que asisto al show disfrutando como casi nunca.

Umma Thurman no tiene desperdicio como esa vengativa mujer entrenada para matar. Con el chandal amarillo de Bruce Lee en Game of Death (Juego con la muerte, 1978),  recuerdo que me lo pasé pipa con esa peli en el cine de niño, se convierte en la reencarnación de los mejores karatekas del cine de artes marciales. Sus rivales son un compendio de actores fantásticos que conforman el río de enemigos a los que se tiene que enfrentar la heroína (Lucy Liu, Vivica A. Fox, Daryl Hannah, Michael Madsen) y como colofón actoral un magnífico David Carradine que es el malvado Bill del título.

No quiero olvidar que se incluye una parte de animación con la que se cuenta una secuencia completa, que los personajes son llamados por sus nombres de guerra, que en Estados Unidos (creo que también en otros países) la pelea más sangrienta se proyectó en blanco y negro (hay otras secuencias en blanco y negro), que tiene la típica escena de profesor de artes marciales enseñando al alumno y que todo ello no desentona en un film que coge de aquí y allá para dejar su huella personal.

Se ha anunciado que habrá continuación dentro de unos años y los que nos hemos divertido tanto con esta espiral de violencia, cómic, diálogos marca de la casa y música que redondea el producto; estamos a la espera de volver a ver a Umma con esa katana rebanando clichés del cine de pura acción. Quentin Tarantino y su batidora fímica, consiguen que la cultura pop se convierta en clásica así que solamente me queda aplaudirle su osadía.

0 comentarios :