Comedia francesa sobre una chica de dieciséis años que ha logrado éxito de público en su país de origen y que aquí creo, que pasó con más pena que gloria.
La mirada sobre esa etapa juvenil de una chica de instituto, su grupo de amigos, las relaciones con sus padres separados y las desventuras amorosas y/o sexuales, está marcada por un deseo de reflejar a una juventud actual que vive rodeada de tecnología y acostumbrada a un entorno de drogas blandas y alcohol.
A mí me funciona como entretenimiento y en algunas escenas acabó descacharrado de la risa: el viaje a Londres con esa imagen friky de sus habitantes y su manera de comer, me parece muy aguda; y también me hacen sonreír esas divertidas reuniones de los papás de las criaturas.
Debo reconocer que contiene varios lugares comunes, pero en general se salva por el acierto de la protagonista Christa Theret y la presencia de la siempre guapa Sophie Marceau. Por lo menos, la cinta es inteligente y aunque va dirigida a su público potencial, se ve con agrado y simpatía.
El remake norteamericano ya está a punto de estrenarse. Como suele ocurrir cuando un film europeo funciona, se empeñan en contar la misma historia una vez más para "adaptarla" a su público,.
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