Harold Ramis me parece un director bastante insustancial. Tiene películas aceptables: Groundhog Day (Atrapado en el tiempo) y Multiplicity (Mis dobles, mi mujer y yo), que me han convencido menos en un visionado posterior; pero además también ha dirigido bodrios como Year One (Año Uno).
Con esta película que aquí comento, me ha vuelto a pasar lo mismo. La recordaba graciosa pero solamente llega a ese punto: es graciosa y nada más. Un psiquiatra en preparativos de su segunda boda (Billy Cristal) debe tratar a un mafioso con problemas depresivos (Robert De Niro) y la comedia enciende sus motores con el enfrentamiento entre el mundo más o menos normal del doctor, y los códigos mafiosos del gánster.En ese mundo del gánster es dónde están los mejores aciertos con una buena ambientación y personajes secundarios bastante logrados.
Lo peor es que recurre a demasiados tópicos, desde recrear escenas conocidas de la saga de El Padrino, hasta un insistente lacrimógeno Robert De Niro, que acaba pareciéndome inaguantable. Eso que, por lo menos, lo llevo mejor que a Billy Cristal, también productor de la cinta, al que pocas veces le encuentro esa bis cómica que tanta fama le ha dado.
La cinta tuvo una continuación, Analyse That (Otra terapia peligrosa ¡Recaída total!, 2002) que abunda en lo mismo, pero con menos gracia.
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