Comedia de gran éxito en su época de estreno y que sigue manteniendo todas sus virtudes. Es puro cine británico social, muchas veces pendiente de mirar a las clases más desfavorecidas, en esta ocasión a un grupo de desempleados que buscan la manera de salir de su precariedad económica con la peregrina idea de montar un grupo de strippers masculino para actuar en el barrio dónde viven. Ken Loach y Sthephen Frears han regalado buenas muestras de este tipo de cine, mientras que en España tenemos a Fernando León de Aranoa con algunas similitudes en su enfoque social aunque con menos carga cómica en las historias. No quiero olvidar que el director Peter Cattaneo también es el responsable de The Rocker que vi no hace muchos meses.
La película avanza con diversión, con unos actores en estado de gracia y un buen guión que nos lleva de la mano por los avatares de estos hombres que se buscan la vida, casi siempre desde el lado de la risa, hasta llegar al final esperado: la actuación ante una platea con ganas de ver como se desnudan. Por el camino, hay problemas de parejas separadas con hijos, de mentiras conyugales, de complejos físicos, de crecimiento personal y también de compañerismo. El humor sirve para darle la vuelta a lo que sería un relato duro de crisis laboral, y la verdad es que se agradecen comedias con esta calidad para echarse unas risas aunque el tema de fondo sea serio.
2 comentarios :
La vi en el cine hace ya unos cuantos años y me pareció muy divertida. Humor para tratar temas de denuncia social.
Yo también la vi en el cine cuando se estrenó, por eso digo que, ahora que la he vuelto a ver en DVD, mantiene todas sus virtudes.
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