El austriaco Billy Wilder fue el director de algunas de las mejores comedias americanas. Recuerdo especialmente cuando pude ver esta película en una sesión de los desaparecidos cines madrileños Alphaville. Me reí muchísimo durante la proyección y ahora he vuelto a recordar esta película en una grabación de vídeo que tenía.
Se trata de una comedia corrosiva, como la mayoría de las de Wilder, en la que el director de Coca Cola en Berlin occidental busca la manera de ocultar que la hija de un jefazo de la empresa, se ha casado con un activista comunista durante el tiempo que la chica estaba a su cargo. En unas horas, las que faltan para la llegada de los padres de ella, debe reeducar al chico comunista y darle un cambio profundo tanto estética como ideológicamente.
Wilder ridiculiza a la sociedad comunista pero al mismo tiempo se ríe de la capitalista y, cómo siempre, no deja títere con cabeza, en un film divertido de principio a fin y que cuenta con la gran y omnipresente actuación de James Cagney en uno de sus mejores papeles.
0 comentarios :
Publicar un comentario