La productora Pixar es sinónimo de calidad y casi siempre va cogida de la mano de la originalidad. Inside Out parte de una idea magnífica: que veamos a los sentimientos que están en el interior de la cabeza de una niña y como es su lucha diaria por formar su personalidad. La dirección corre a cargo de Peter Docter, que también fue responsable de Up, y acompañado del novato en estas funciones, Ronnie del Carmen.
Riley es una niña de once años que se muda de ciudad con su familia. Hasta ahora la Alegría es el sentimiento que ha marcado su existencia pero junto a éste, también están otros como la Tristeza, el Miedo, la Furia y el Asco. Los cambios que se están produciendo en su vida, hacen que la Alegría no sea quién ocupe el primer lugar en su estado actual.
Como decía, magnífica idea. En pantalla vemos lo que le sucede a la protagonista en su vida cotidiana y también asistimos al interior de su cerebro con los cinco sentimientos encarnados en otros tanto personajes, manejando el panel de control del cerebro de la niña, con estanterías donde se acumulan los recuerdos y experiencias, así como otras cosas que pululan por su mente, como el tren del pensamiento o la isla de la familia y de la amistad.
Y aunque me guste mucho como idea y tenga partes de su desarrollo que me parecen estupendos, también acabo un poco defraudado al comprobar que no todo me convence. Que la acción lleva a que Alegría y Tristeza tengan que correr una aventura para volver al panel de control de la niña se me hace insípido, que lo más importante que ocurre fuera de su mente sea que la niña tiene nostalgia por su ciudad no es suficiente o que se me haga un poco repetitiva la idea de partida me lleva a simplemente dejarla como una buena película.
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