Al hilo de la lectura de la noticia del próximo cambio del sistema español de calificación por edades de las películas, que he leído por aquí, me gustaría apuntar mi propia opinión.
Tengo una hija de once años e inevitablemente vemos muchas películas juntos. Si la película ya la he visto antes y la recuerdo más o menos con claridad, me fío de mi propia experiencia y decido si ella la puede o no puede ver. Pero muchas veces o no recuerdo toda la película o no la he visto todavía, por lo que tengo que fiarme de la forma en que ha sido calificada oficialmente.
Si la película es un DVD original solamente hay que mirar la calificación en su carátula, si es un estreno de cine hay que buscar por Internet hasta dar con dicha calificación que no siempre se encuentra tan fácilmente (en la prensa muchas veces no viene ese dato) y lo mismo si la película no la tenemos en su DVD original porque sea una grabación de la televisión, una copia o la haya bajado de Internet. Mi sistema es buscar en la base de datos del Ministerio de Cultura y luego fiarme de mi criterio e intuición. Porque no es nada raro que una película calificada para una determinada edad, luego a mí no me parezca adecuada por determinada escena violenta, sexual o de otro tipo.
Actualmente en España la calificación de películas viene fijada por varias categorías: "Autorizada para todos los públicos", "No recomendada a menores de 7 años", "No recomendada a menores de 13 años" y "No recomendada a menores de 18 años". En realidad este sistema de recomendación no es muy útil que digamos. Fija varias fronteras de edad y a partir de ahí recomienda o no su visionado sin más. Sólo es una recomendación ,para nada una prohibición, por lo que somos los padres los que tenemos que decidir sobre esta recomendación ya que no se prohibe el acceso a la sala de cine, aunque el film no sea recomendado para la edad del menor.
Creo que sería mucho más adecuado un sistema de calificación con anagramas, parecido al de los videojuegos. Un sistema gráfico en el que se hiciera constar qué contenidos no adecuados para un menor tiene la película y que podrían herir su sensibilidad: violencia, sexo, drogas,... Así sabríamos a qué atenernos con mayor claridad y más argumentos que la simple calificación por edades.
Cada niño es un mundo y los criterios de los padres a la información a la que sus hijos pueden acceder son totalmente personales. Conozco a mi hija y creo que sé lo que le afecta y lo que no. Tengo mi criterio sobre lo que todavía no me parece adecuado para ella. Supongo que ese tiene que ser el factor que decida qué películas puede ver.
Al final, estas calificaciones son simplemente una ayuda que no es ni definitiva ni clarificadora de si nuestro hijo puede o no puede quedar impactado por el contenido de la película. Con la experiencia te das cuenta de que ocurre que determinada película que está calificada "para todas las edades" es de contenido blanco (sin sexo, sin violencia) pero su temática no es entendible para el menor, ¿y eso cómo se califica".
No hay una misma vara de medir para todo el mundo. Lo único que a mí me sirve es verla con ella, explicándole lo que no ha entendido, trivializando lo no importante que le ha afectado (¡es sólo una película!), dejando de verla si definitivamente no es adecuada o no la asimila (bueno, ya la verás cuando seas un poco más mayor), hablando, escuchando y sobre todo disfrutando de un rato de cine compartido.
Tengo una hija de once años e inevitablemente vemos muchas películas juntos. Si la película ya la he visto antes y la recuerdo más o menos con claridad, me fío de mi propia experiencia y decido si ella la puede o no puede ver. Pero muchas veces o no recuerdo toda la película o no la he visto todavía, por lo que tengo que fiarme de la forma en que ha sido calificada oficialmente.
Si la película es un DVD original solamente hay que mirar la calificación en su carátula, si es un estreno de cine hay que buscar por Internet hasta dar con dicha calificación que no siempre se encuentra tan fácilmente (en la prensa muchas veces no viene ese dato) y lo mismo si la película no la tenemos en su DVD original porque sea una grabación de la televisión, una copia o la haya bajado de Internet. Mi sistema es buscar en la base de datos del Ministerio de Cultura y luego fiarme de mi criterio e intuición. Porque no es nada raro que una película calificada para una determinada edad, luego a mí no me parezca adecuada por determinada escena violenta, sexual o de otro tipo.
Actualmente en España la calificación de películas viene fijada por varias categorías: "Autorizada para todos los públicos", "No recomendada a menores de 7 años", "No recomendada a menores de 13 años" y "No recomendada a menores de 18 años". En realidad este sistema de recomendación no es muy útil que digamos. Fija varias fronteras de edad y a partir de ahí recomienda o no su visionado sin más. Sólo es una recomendación ,para nada una prohibición, por lo que somos los padres los que tenemos que decidir sobre esta recomendación ya que no se prohibe el acceso a la sala de cine, aunque el film no sea recomendado para la edad del menor.
Creo que sería mucho más adecuado un sistema de calificación con anagramas, parecido al de los videojuegos. Un sistema gráfico en el que se hiciera constar qué contenidos no adecuados para un menor tiene la película y que podrían herir su sensibilidad: violencia, sexo, drogas,... Así sabríamos a qué atenernos con mayor claridad y más argumentos que la simple calificación por edades.
Cada niño es un mundo y los criterios de los padres a la información a la que sus hijos pueden acceder son totalmente personales. Conozco a mi hija y creo que sé lo que le afecta y lo que no. Tengo mi criterio sobre lo que todavía no me parece adecuado para ella. Supongo que ese tiene que ser el factor que decida qué películas puede ver.
Al final, estas calificaciones son simplemente una ayuda que no es ni definitiva ni clarificadora de si nuestro hijo puede o no puede quedar impactado por el contenido de la película. Con la experiencia te das cuenta de que ocurre que determinada película que está calificada "para todas las edades" es de contenido blanco (sin sexo, sin violencia) pero su temática no es entendible para el menor, ¿y eso cómo se califica".
No hay una misma vara de medir para todo el mundo. Lo único que a mí me sirve es verla con ella, explicándole lo que no ha entendido, trivializando lo no importante que le ha afectado (¡es sólo una película!), dejando de verla si definitivamente no es adecuada o no la asimila (bueno, ya la verás cuando seas un poco más mayor), hablando, escuchando y sobre todo disfrutando de un rato de cine compartido.
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