Una cinta áspera que no ofrece muchos resquicios dónde agarrarse y que cuenta la odisea de una niña que busca el paradero de su padre para mantener la propiedad del hogar dónde vive con sus dos hermanos pequeños y su madre enferma.
Rodada en las montañas de Missouri, un lugar gélido en el paisaje y en los lugareños, que se relacionan en clanes familiares y casi mafiosos. La elaboración de droga casera, anfetaminas, y la destilación de alcohol; son los oscuros intereses que te pueden llevar a la cárcel y hasta la muerte. Y en ese entorno, se mueve la niña protagonista (espléndida Jennifer Lawrence) con la sombra del padre desaparecido siempre presente.
Me ha resultado demasiado dura narrativamente y esa dureza ha sido la parte que más me ha costado asimilar. Porque el relato en su conjunto es interesante pero como espectador a veces me siento poco atraído por la sobriedad de las imágenes que en su conjunto sí que me tocan.
2 comentarios :
Acabo de comentarla en la tartaruga:
El sonido de la motosierra me impide ver esas imágenes. Se te queda mal cuerpo al acabar y esa sensación no me gusta nada. Cine para sufrir, eso sí, muy bien hecho y con excelentes actores.
Uff
A mi me hace sufrir tanto por lo que cuenta como por la sobriedad con que lo cuenta. La disfruto más cuando acaba y pienso sobre ella que mientras estoy viéndola.
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