Lo que más me atrajo de esta película fue su reparto, nada menos que George Clooney, Ewan McGregor, Jeff Bridges y Kevin Spacey juntos. El director es novato en estas lides y adapta un libro de Joe Ronson que cuenta hechos basados en la realidad.
Esta realidad, por absurda que parezca, cuenta que el ejercito de los Estados Unidos, mantiene una unidad militar experimental que trabaja en la manera de usar poderes mentales para combatir al enemigo. Como si fueran auténticos Jedis de la saga de Star Wars, estos hombres con su poder mental, son capaces de atravesar paredes, hacerse invisibles, predecir hechos o parar el corazón de los animales, entre otras virguerias. O por lo menos eso creen ellos, menos mal que las drogas y la imaginación, les ayudan a seguir creyéndolo.
Con ese argumento no puede ser otra cosa que una comedia y es una lástima que aunque tiene un buen tono en su principio y algunos gags desternillantes, va dejándose llevar por situaciones vulgares que finalizan en un aburrimiento general. La película no consigue sacarle mejor rendimiento a la idea de partida ni a unos actores adecuados para esos papeles tan surrealistas. Sobre todo me ha hecho gracia ver a Ewan McGregor como el periodista que investiga el poder Jedi del ejercito USA y algunas secuencias de la locura-clarividencia de George Clooney, o del historial de gurú de Jeff Bridges.
Esta realidad, por absurda que parezca, cuenta que el ejercito de los Estados Unidos, mantiene una unidad militar experimental que trabaja en la manera de usar poderes mentales para combatir al enemigo. Como si fueran auténticos Jedis de la saga de Star Wars, estos hombres con su poder mental, son capaces de atravesar paredes, hacerse invisibles, predecir hechos o parar el corazón de los animales, entre otras virguerias. O por lo menos eso creen ellos, menos mal que las drogas y la imaginación, les ayudan a seguir creyéndolo.
Con ese argumento no puede ser otra cosa que una comedia y es una lástima que aunque tiene un buen tono en su principio y algunos gags desternillantes, va dejándose llevar por situaciones vulgares que finalizan en un aburrimiento general. La película no consigue sacarle mejor rendimiento a la idea de partida ni a unos actores adecuados para esos papeles tan surrealistas. Sobre todo me ha hecho gracia ver a Ewan McGregor como el periodista que investiga el poder Jedi del ejercito USA y algunas secuencias de la locura-clarividencia de George Clooney, o del historial de gurú de Jeff Bridges.
2 comentarios :
Creo que es una delicia de comedia, considerando el estado en el que se encuentra actualmente este género. Cierto es que el gran atractivo del film es su espectacular reparto, del que nos queda la impresión de que termina algo desaprovechado (en especial Kevin Spacey), pero está filmado con evidente gamberrismo y se nota que los actores se lo pasaron de miedo en el rodaje.
En cuanto a su humor, creo que es una película hecha por personas inteligentes y para personas inteligentes. Yo la vi con algunos amigos "poco entendidos" en asuntos de política exterior (vamos a dejarlo ahí, creo que ya me entendéis) y se aburrieron como ostras. Yo también considero, como la mayor parte de la crítica internacional, que debería haber sido dirigida por los Coen para sacarle el máximo provecho a esta idea.
A mi me pareció realmente entretenida -y que conste que no me estoy autodenominando inteligente, simplemente hay que saber un poco del tema para disfrutar, no es tan complicado- y capté el mensaje de la película desde el principio. Después de una hora y media fantástica, la voz de Ewan McGregor resume lo que mi cabeza lleva un largo rato pensando: "Cuando veo lo que ocurre en el mundo, sé que ahora, más que nunca, tenemos que ser todo lo que podamos ser. Ahora, más que nunca... necesitamos a los Jedi". Brillante.
Pues a mí me dejó frío. Algunas cosas me hicieron gracia pero en general creo que la película pierde el rumbo y acaba siendo un total disparate.
Me da igual el estado de la comedia actual, en realidad, no creo que eso sirva de pretexto. Tampoco me impresiona su espectacular reparto lo considero más que desaprovechado. En cuanto al gamberrismo se queda en caos y si los actores se lo pasaron de miedo, a mí como espectador, no me llegó ni se me pegó su diversión.
Si hubiera sido dirigido por los hermanos Coen sería otra película. Eso lo tengo claro. Pero los Coen no son tan chapuzas. Porque a mi la impresión que se me queda al final es de una película bastante chapuzas para lo que prometía.
No puedo más que resumir mi opinión en que tiene un genial punto de partida pero todo se diluye según pasan los minutos y mis carcajadas iniciales acaban convertidas en bostezos.
Publicar un comentario