27 de enero de 2010

THE WESTLER (El luchador, 2008) - Darren Aronofsky




Una estrella de wrestling se enfrenta a su decadencia popular, personal, familiar y sobre todo física. Mickey Rourke con su presencia casi absoluta en las imágenes, encarna a éste anti héroe y además sirve como metáfora de lo que éste actor significó en los ochenta cuando era uno de los más populares del star system.

El físico de Rourke y la contención del guión, hacen que la película avance con interés, con sentimiento, sin escatimar crudeza en la vida de un personaje que no se relaciona con su hija, necesita trabajos alimenticios para sobrevivir o mantiene una difícil relación con una stripper que significa el reencuentro con una magnífica Marisa Tomei. No son las escenas de wrestling lo que importan sino verlo sólo de espaldas, en su caravana, en el vestuario o intentando ser amable detrás del mostrador de la carnicería.

Me engancho a este peculiar tipo que está dibujado con profundidad y que a la vez de producirme lástima me llena de empatía. Acabo con mi gran admiración por lo bien que me lo ha contado el director Darren Aronofsky, al que desconocía y desde ahora considero un artista a seguir. Las historias de perdedores siempre me han interesado.

3 comentarios :

leolo dijo...

Una película que, a pesar de contar una historia poco original por ya vista en muchos otros films, funciona y emociona. Y lo hace por la cercanía y honestidad con que filma a sus personajes, auténticos perdedores que luchan por ofrecer dignidad a sus ajadas vidas. Grandioso Mickey Rourke y estupenda Marisa Tomei.
Para mí lo mejor con diferencia de Aronofsky.

Saludos

eloy

xalons dijo...

No he visto ninguna de las películas anteriores de Aronofsky aunque intentaré cubrir esta laguna. Totalmente de acuerdo contigo en que los personajes se hacen honestos y cercanos. Es esa honestidad lo que más me ha hecho meterme en sus míseras vidas y lo que me ha ganado como espectador de esta película.

Gaviota dijo...

Una de Aronofsky que disfruté es "The fountain" con Hugh Jackman y Rachel Weisz.