Tercera película dirigida por el actor George Clooney, después de Confessions of a Dangerous Mind (Confesiones de una mente peligrosa, 2002) y Good Night, and Good Luck (Buenas noches y buena suerte, 2005).
El humor es el género escogido para contar cómo fueron los inicios del futbol americano profesional en la década de los veinte. Y el espejo cinematográfico que se mantiene a lo largo de todo el metraje, son las comedias de los años treinta-cuarenta. No es dificil pensar en esas películas viendo ésta y en ocasiones se consigue llegar al nivel deseado.
La película me entretiene, me divierte y me hace reír con algunas de las escenas. En su contra me sobra la interpretación de Renée Zellweger, que aunque me parece una buena comediante, no me convence como la mujer bella e inteligente que debería mostrar su personaje. El resto de la película si que me convence, tanto ambientación, música, guión, cómo el tono divertido de toda la cinta en la que me sorprendo con lo payaso que me resulta George Clooney, en ocasiones un poco sobreactuado, pero muy apropiado para conducir la historia al estilo de un Cary Grant.
Aunque no sea una gran película, Leatherheads (por cierto, el título en español es horrible), destaca muy por encima de las comedias norteamericanas actuales. Lo más difícil, el tono de comedia, está bastante logrado. No hay concesiones a los chistes modernos sino que la película es fiel al momento cinematográfico en el que quiere quedarse. Mirando muy por encima al grueso de las comedias norteamericanas actuales, esta película destaca con suficiencia y lo puedo decir con conocimiento de causa ya que en estos últimos días he visto bodrios tan infumables como Año Uno, exitazos de taquilla tan irregulares como The Hanghover (Resacón en Las Vegas), o tan solamente correctos cómo The Heartbreak Kid (Matrimonio compulsivo). Ojalá hubiera más comedias actuales de su nivel.
El humor es el género escogido para contar cómo fueron los inicios del futbol americano profesional en la década de los veinte. Y el espejo cinematográfico que se mantiene a lo largo de todo el metraje, son las comedias de los años treinta-cuarenta. No es dificil pensar en esas películas viendo ésta y en ocasiones se consigue llegar al nivel deseado.
La película me entretiene, me divierte y me hace reír con algunas de las escenas. En su contra me sobra la interpretación de Renée Zellweger, que aunque me parece una buena comediante, no me convence como la mujer bella e inteligente que debería mostrar su personaje. El resto de la película si que me convence, tanto ambientación, música, guión, cómo el tono divertido de toda la cinta en la que me sorprendo con lo payaso que me resulta George Clooney, en ocasiones un poco sobreactuado, pero muy apropiado para conducir la historia al estilo de un Cary Grant.
Aunque no sea una gran película, Leatherheads (por cierto, el título en español es horrible), destaca muy por encima de las comedias norteamericanas actuales. Lo más difícil, el tono de comedia, está bastante logrado. No hay concesiones a los chistes modernos sino que la película es fiel al momento cinematográfico en el que quiere quedarse. Mirando muy por encima al grueso de las comedias norteamericanas actuales, esta película destaca con suficiencia y lo puedo decir con conocimiento de causa ya que en estos últimos días he visto bodrios tan infumables como Año Uno, exitazos de taquilla tan irregulares como The Hanghover (Resacón en Las Vegas), o tan solamente correctos cómo The Heartbreak Kid (Matrimonio compulsivo). Ojalá hubiera más comedias actuales de su nivel.
1 comentarios :
La verdad que el nivel cómico actual es bastante bajo, de hecho hay películas que no te valen ni para pasar el rato, así que ésta que comentas parece que tiene algo más así que la veré en cuanto caiga en mis manos. Saludos
Publicar un comentario