La primera parte es divertida, la segunda baja bastante el listón pero mantiene sus buenos momentos, pero ésta tercera parte de la saga Meet the Parents, llega al nivel mínimo.
Esto ocurre porque ya no hay más jugo que sacar al enfrentamiento entre el suegro que trabajó para la CIA (Robert de Niro) y el yerno torpe que se ha llevado a su hija (Ben Stiller). Es una pena ver que todo transcurre sin gracia, con situaciones más que forzadas y un bostezo general por unos personajes que ya caminan sin rumbo hacia ninguna parte.
El director Paul Weitz se estrena en la saga y no sé si echarle la culpa a él, al guión o al simple desgaste de una situación que llegó a funcionar como buena comedia y que ahora deseo que se acabe de una vez por todas porque ya no podré darle menos estrellitas.
0 comentarios :
Publicar un comentario